Sin Censura / Cambio de dueño
Por Juan Luis Cruz Pérez - julio 9, 2021
El Poder Legislativo local parece que ya cambió de dueño. Muerto el rey, viva el rey. Con los resultados de los comicios del pasado 6 de junio, la mayoría de los integrantes de la LXIII Legislatura local terminaron de replegarse a favor de quien, a partir del 31 de agosto, dirigirá los destinos de Tlaxcala.
Con ello, los acuerdos a conveniencia que ya existían con el todavía mandatario, Marco Mena, se fueron al bote de la basura, de ahí que, si pensábamos que ya habíamos visto todo de parte de los actuales inquilinos del Palacio Legislativo, nos equivocamos.
Y en una de tantas, podrían venir algunas vendettas, en especial, en contra de quienes, estiman, estuvieron en contra de quien será la segunda mujer que gobierne Tlaxcala.
Con el cambio de dueño, el lazo empezó a apretarse y por ello, vendrán algunas acciones.
Ejemplo de lo anterior es que, de la noche a la mañana, los diputados se dieron cuenta de la ilegal, presuntamente, integración del Consejo de la Judicatura del Poder Judicial, de los supuestos abusos de Fernando Bernal Salazar al frente de Poder Judicial y de que, perdieron casi tres años, para reformar la legislación y crear la Fiscalía General de Justicia del estado.
Parece que el lazo fue apretado y acortado por la mano de quien terminó por controlar a la mayoría de los diputados, que muestran sumisión, con la esperanza de que, al finalizar su encargo, encuentren otro espacio en la función pública.
De entrada, parece que la encomienda es castigar y deshacerse del Leonel Ramírez, ex representante del PRI ante el ITE en los comicios de 2016, cuando Marco Mena ganó la gubernatura.
Ayer los diputados avanzaron en el tema, al asegurar que dicho personaje incumple con los requisitos para ser integrante del Consejo de la Judicatura del Poder Judicial.
Tras 16 meses en el cargo, hasta ahora los diputados “descubrieron” que el señor les hizo chapuza, porque no tenía, al momento de asumir el cargo, en marzo del año 2020, cédula profesional con 10 años de antigüedad como lo exige la legislación.
Lorena Cuéllar, como súper delegada, ya había vetado a Leonel Ramírez cuando Marco Mena lo designó como secretario Técnico de las mesas por la paz, esas que se instalaron al inicio de la administración federal, allá en diciembre de 2018.
También parece que quieren llamar a cuentas al presidente del Poder Judicial; ya lo citaron a comparecer por presuntamente incurrir en diversos actos y omisiones que hasta podrían constituirse en delitos, mismos que les costarían el cargo.
En la burbuja de la futura gobernadora aseguran que Bernal Salazar apoyó a la otrora candidata priista al gobierno del estado, Anabell Ávalos Zempoalteca.
Aunque para muchos, la comparecencia del presidente del Poder Judicial solo forma parte de una cortina de humo, para deshacerse de Leonel Ramírez, lo cierto es que el Congreso del estado empieza a actuar bajo los designios del nuevo patrón.
Si el proceder de los diputados es conforme a derecho, bienvenido. Pero parece que vendrán más acciones a modo de la nueva dueña del Legislativo.
Se actúa como se es y no cabe duda que muchos aprendieron del viejo sistema, en donde las facturas son para cobrarse y poder que no se ejerce, se vuelve en contra de quien lo ostenta.
El control de quien gobernará Tlaxcala se empieza a dejar sentir y ver a 55 días de que asuma funciones.
Lo que es un hecho es que los todavía inquilinos de Palacio Legislativo ya negaron a su ex patrón, y ahora, se pliegan a la nueva mandamás, en un estado en donde, se asegura, hay división y autonomía de poderes, pero solo en la teoría y la imaginación, porque hoy como siempre, el gobernador en turno es el máximo legislador, aunque ahora, parece que lo hacen mucho antes de asumir el poder con este cambio de patrón.