EL CONTRATO OCULTO
8 De Abril - 2022
Por Edgardo Cabrera
Ni un mes les bastó para sacar el cobre, en la Secretaría de Educación Pública los problemas empezaron desde que se les obligó a los docentes a transportarse hacinados en unos camiones chatarra para el regreso a clases presenciales.
Tras la protesta, vino el primer acto protagónico del recién estrenado funcionario público, Homero Meneses. Cual redentor, anunció la contratación de más camiones, hasta nuevas rutas para el programa “primero los maestros”, ¡peroooo!, nunca nos dijo que los beneficiados por una adjudicación directa tenían nexos con el también nuevo funcionario, el entonces director de Transporte, Rubén Domínguez.
Llegó enero y con poco más de 100 días del nuevo gobierno vino la tragedia, uno de esos camiones chatarras volcó y cobró la vida de un trabajador. De nueva cuenta, el secretario, en complicidad con el dirigente del SNTE sección 31, salieron a dar una apresurada rueda de prensa donde minimizaron el hecho; fueron hipócritas sus condolencias y la promesa de que mejoraría el servicio nunca ocurrió.
Ahí se dio la gran mentira, Homero Meneses dio a conocer -a pregunta expresa- que el prestador del servicio era una “empresa” de nombre “Alejandra”, él lo dijo y está grabado. Ocultó el contrato y por tanto su contenido.
Una solicitud de información de Gentetlx develó la chapuza, siempre no era una empresa la contratada, sino un particular, nada menos que la hermana de quien fungía como director de Transporte de la Secretaría de Movilidad. Más de 15.5 millones de pesos y se negó entregar copia del convenio, la Triste Historia condicionó el pago de derechos de las copias certificadas, pasándose por el arco del triunfo lo que establece la ley de Acceso a la Información Pública, dado que por el número de fojas del documento debió entregarse sin costo, que revisen el artículo 133.
Claramente se ocultó la información, sabían que ese documento es la evidencia del favoritismo para entregar el contrato sin licitación, pero también que, pese al accidente y la documentada chatarra que brinda el servicio, se debió rescindir al día siguiente de la tragedia, el día 21 de enero. Es la fecha que siguen operando con la complacencia tanto de la autoridad como del sindicato, no les importan sus empleados ni sus agremiados.
VAYA DESCARO
Ahí no acaba la cosa, ahora sabemos que el contrato se firmó el día 19 de enero, un día antes del accidente en la carretera que conduce al municipio de Emiliano Zapata; ¿de qué forma operó los primeros días de ese mes el servicio?
Considerando que el incidente ocurrió un día después de la firma del convenio, Homero Meneses no tenía pretexto de equivocarse en aquella conferencia de prensa cuando dijo que el proveedor era una empresa, más no un particular; tampoco informó el nombre del beneficiado con los 15.5 millones de pesos, ni el periodo pactado. Ahora sabemos que es hasta agosto de 2022 y no hay poder humano ni legal, está visto, que lo cancele.
La cosa no acaba ahí, también entendemos porqué se nos negó conocer el contrato, y es que a tres meses del accidente el secretario de Educación no ha hecho valer las cláusulas, una de ellas, que se cumpla con calidad el servicio, que las unidades estén en buen estado, y hasta con aire acondicionado, baño y con música ambiental, en la respuesta a nuestra solicitud de información la dependencia dijo que “es de entenderse que son vehículos en buen estado físico y mecánico”, y no, NO ES DE ENTENDERSE, el contrato es claro y la USET debe verificarlo.
La cereza de este sucio pastel, es la adjudicación directa. Por el monto, 15.5 millones de pesos, debió realizarse una licitación Pública Nacional, sin embargo, Homero Meneses consintió pasarse, por alto la normatividad excusando que dicha figura opera en la solicitud a la excepción en casos de: programas prioritarios o por situaciones que pongan en peligro el orden social.
Dado que es un programa que data de sexenios atrás, no podría considerarse “prioritario”, menos un peligro de orden social, en los hechos se favoreció a la hermana de quien era funcionario en la fecha en que se firmó y pareciera que, convenientemente, se pretende hacer lo mismo en agosto próximo, ¿ahora a quién querrán beneficiar?
