Sin Censura
Cochinero
Por Juan Luis Cruz, agosto 25, 2021
Un vil cochinero es el que está saliendo a la luz pública al conocer algunos –no todos, seguramente- excesos, abusos y arbitrariedades cometidos por nuestra clase política, mismos que deberían tener implicaciones, más allá del escarnio público, que bien podría ser la “muerte civil” para los responsables.
Con el término inminente del mandato constitucional, en el Ejecutivo y en el Legislativo, surgen las historias de hechos a todas luces inmorales, porque, amparados del cargo público, servidores públicos, diputados, líderes sindicales, entre otros, han logrado beneficios personales, para su parentela y, sobre todo, millonarias ganancias para su peculio.
La asignación de plazas para hijos, hermanos, esposas, familiares consanguíneos y por afinidad, el tráfico de influencias para lograr posiciones en la administración pública, la casi inminente asignación de una patente de notario, el otorgamiento de claves para operar escuelas privadas y hasta la pretensión del cobro de gratificaciones por fin de legislatura y “estímulo” por cumplir su obligación, describe de “puerco entero” a la mayoría de nuestra clase política.
Ninguno de los poderes del Estado se salva de estas conductas; mucho menos en los ayuntamientos, en donde, casi todos, han metido a Tlaxcala en un verdadero cochinero.
Ayer, una organización de la sociedad civil presentó una denuncia penal ante la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción por el delito de tráfico de influencias en contra de diputados locales, de sus familiares beneficiados con plazas y del líder sindical del 7 de Mayo, Édgar Tlapale.
El motivo es la asignación unilateral de 34 plazas laborales entre diputados y el gremio de burócratas.
Aunque mucho se ha especulado los nombres y los beneficiarios de esos espacios, de acuerdo con información oficial, emanada del propio sindicato 7 de Mayo, la encabeza, la esposa del diputado morenista, Víctor Castro López, Mayra del Carmen Armas García, seguida de la prima del petista Miguel Ángel Covarrubias, Lupita Evelyn Bustos Cervantes, seguida de dos familiares de la diputada de Nueva Alianza, Luz Mata Lara, que son su hijo José Morales Mata y su sobrino, David Cabrera Mata.
También con dos plazas se quedó, presuntamente, el pastor del PEST, José Luis Garrido Cruz; una para su pequeño hijo, Luis Iván Garrido Olvera, y otra para su querida sobrina, Cristian Carol Montiel Garrido.
El presidente del Comité de Administración, Rafael Ortega no rehuyó a esa posibilidad y dejó un espacio para su sobrino, Rogelio Fermín Salinas Ortega, mientras que su correligionaria, la morenista María del Rayo, dejó basificada a su hermana Minerva Netzahuatl Ilhuicatzi. Total, el orgullo de su nepotismo.
En tanto que la diputada del PVEM, Maribel León Cruz, quien mantendrá la condición de congresista, habría asegurado una plaza para su sobrino Héctor Eduardo León Flores, mientras que la petista Michael Brito Vázquez asignó su plaza a Cristina Chávez Hernández; en este caso, se desconoce su relación.
La diputada de Movimiento Ciudadano, Isabel Casas Meneses, de acuerdo con información oficial, dio la plaza a Norma Lara Lara, presuntamente su cuñada y Ramiro Vivanco Chedraui dejó ese lugar para quien lo acompañó como secretario técnico, Enrique Morales Cruz.
Otros morenistas que se pasaron por el arco del triunfo los ideales del no robar, no mentir y no traicionar son Víctor Manuel Báez López, quien asignó la plaza a su sobrino, José Manuel Moctezuma Báez; Jesús Rolando Pérez Saavedra, dejó a su hija Brenda Guadalupe Pérez López; Miguel Piedras Díaz a su hijo Nahidelin Sharonn Piedras Gutiérrez y José María Méndez Salgado lo hizo a favor de su ex pareja Teresita Vieyra Lima
Mientras que la panista Leticia Hernández Pérez dejó basificada a su hijo Alexis Hernández Hernández y la priista Zonia Montiel también logró un espacio para Francisco Vázquez Salvatierra.
Todos ellos lograron las plazas a cambio de otros espacios para el sindicato 7 de Mayo, que fueron entregados, sin saber méritos, costos ni la forma de hacerlo, a favor de Saúl Meneses Zitlapopoca, Sonia Hernández Pérez, María Magdalena Muñoz Reyes, Wendy Valeria Temoltzin Cruz, Hugo César Rosete Martínez, Claudia Isela Zarate Cruz, Jorge Tapia Ruíz, Mario Lima Hernández, Miriam Yaneth Grada Sánchez, Axel Pérez González, Leticia Díaz Zistecatl, Karina Chávez Martínez, Cristian Ariane Morales Galicia, Cynthia Fernández Bautista –ex vocera del Congreso local y persona cercana a Ortega Blancas-, Roxana Lizeth Terova Flores e Irma Erika Barrera Vargas.
Todos esos nombres ya están registrados, incluso, en la nómina del Congreso y desde luego, en Pensiones Civiles, de acuerdo con la notificación que hizo el sindicato.
Pero no conformes con ello, algunos diputados han solicitado una serie de pagos extraordinarios por su “destacada labor”.
Es el caso de la diputada Luz Vera, quien como presidenta de la Comisión Permanente y de la Comisión de Puntos Constitucionales, trascendió, pidió el pago de una gratificación por su desempeño.
La legisladora, que ha sido señalada por obtener de manera irregular una serie de claves para operar escuelas privadas en algunos municipios de la entidad, quiere más dinero por sus funciones.
Queda claro que, para algunos, los casi mil 500 millones de pesos que se asignaron en los llamados fondos moches, los más de 240 millones de pesos que tuvieron para gestión social y las decenas de millones de pesos por ajustes trimestrales que se repartieron, no fueron suficientes y quieren más.
Vaya descaro, no tienen llenadera. En una de esas, se llevan hasta la curul que calentaron en tres años.
Pero en el Ejecutivo las cosas no son distintas. A la presunta creación de nuevas bases sindicales, existe el tráfico de influencias y pago de favores.
Sin contar con la especialidad ni el trabajo en la materia, se confirmó que el gobernador Marco Antonio Mena Rodríguez le otorgó la Constancia de Aspirante a ocupar una de las patentes de notario del estado de Tlaxcala a su ex empleado, el ex secretario de Gobierno, José Aarón Pérez Carro.
Con fecha de 19 de agosto, es decir, cuatro días después de su presunta renuncia como encargado de la política interna, el mandatario publicó en el Periódico Oficial del Gobierno del estado, el acuerdo mediante el cual otorga la citada constancia de aspirante de notario a su favor.
A cómo sea, parece que quieren saldar favores al hacer notario a tan soberbio personaje.
Y ahí en el Ejecutivo parece que también saldrán chispas.
En Secture las cifras no cuadran desde hace dos ejercicios fiscales. Son millones de pesos que andan bailando y varios proveedores que siguen sin cobrar.
La cloaca puede explotar, aunque parece que la ex titular le habría tocado su premio y bono por fin de administración.
Estos son solo algunos ejemplos del cochinero en el que han convertido a Tlaxcala por actos de corrupción y por otras acciones, que, aunque legales, son a todas luces, inmorales.
Con el paso de los días y tras dejar el cargo, seguramente se sabrán más acciones que abonan al cochinero estatal.
Pobre de nuestro Tlaxcala.