ESPECIALISTAS
17 De Agosto - 2022
Por Edgardo Cabrera
La Triste Historia es especialista, ¡sí!, en colgarse de la imagen de los demás, en presumir logros que no son suyos y en mentir.
Ante la falta de resultados en las millonadas que destinaron a un torneo de voleibol playero que ni atrajo turistas ni sirvió para fomentar ese deporte (como prometieron), o la ridícula participación del gobierno en el Tianguis Turístico donde presumieron la vil copia de un pueblo italiano, el fin de semana vieron su oportunidad.
Por lo que el tristón aparato de incomunicación y sus focas aplaudidoras se trasladaron a Huamantla para alzar en lo alto el certificado que acredita el tapete de aserrín más grande del mundo, 3.9 kilómetros que destronaron a la ciudad de Antigua del Récord Guinness.
Esas son las cosas que le gustan a la gobernadora Cuéllar, la caravana con sombrero ajeno, prácticamente arrebatando de las manos el cuadro al alcalde Salvador Santos, al mismo al que le dio la espalda en campaña, al que tildaron de iluso y que le ganó a su gallo, Juan Carlos Santiago Pimentel, al mismo que metió a trabajar a Turismo como premio de consolación.
El récord es de los artesanos, así de simple. ¡Ah!, y el video musical no salió gratis, ¿Cuánto costó?
UNA MUESTRA MÁS
Luego de la represión del 8 de Marzo contra las mujeres por parte del gobierno de Lorena Cuéllar Cisneros, y de la agresión a su propio equipo al obligarlos a lavar y despintar su Palacio hasta con cepillos de dientes. Vinieron las lágrimas de cocodrilo, nunca hubo una disculpa, ¡eso sí! justificaciones a los actos violentos de sus granaderos.
Palabras más, palabras menos, dijo que una muestra de que su gobierno “entiende” la lucha femenil y sus causas, fue la incorporación a su gabinete de “activistas”, en clara alusión a Yeny Charrez, designada como titular del Centro de Justicia para Mujeres.
Ninguna activista alzó la voz, toleraron que Cuéllar se colgara de su trabajo e imagen para limpiar su culpa por la represión. El tiempo es el mejor juez y, de nuevo, salió a relucir el verdadero rostro.
El lunes la activista funcionaria fue despedida y humillada. Cobardes, dijeron que “ella renunció”, no tuvieron el valor para señalar al momento lo que este martes boletinaron escondiendo la cabeza, la acusaron de una “serie de inconsistencias” como el supuesto “intento” de aplicar fondos federales para difusión, consultoría, sueldos de personal y gastos de operación.
Y llama la atención que, aunque presumen “irregularidades”, no mostraran ninguna prueba, dicen que ella renunció. Tácitamente están admitiendo que solapan anomalías, lo lógico era su despido e inicio de un procedimiento administrativo, incluso penal.
Por el contrario, la ahora ex funcionaria destapó la cloaca “en vivo” en sus redes sociales mostró documentación, pruebas, confrontó a la subprocuradora, y advirtió que la Triste Historia y su Procuraduría General de Justicia intentaron utilizar esa oficina con fines políticos para Morena, expuso corrupción, sustracción de expedientes, simulación en la atención a las víctimas y el no cumplimiento de las medidas derivadas de la decretada Alerta por Violencia de Género.
¿A quién le creemos?…