Y TODAVÍA PRESUMEN
Por Edgardo Cabrera
Un golpe de 45 millones de pesos al presupuesto estatal significó un largo litigio para “recuperar” (así, entre comillas) dos predios en la capital que hace tres décadas fueron expropiados por el gobernador Tulio Hernández a un ex senador de la República de nombre Miguel Osorio Ramírez para supuestamente instalar oficinas gubernamentales.
Son casi cuatro hectáreas del predio conocido como ex rancho San Isidro y Santa Bárbara, ubicado en la Loma Xicohténcatl, donde ahora se encuentran asentados redituables negocios, organizaciones políticas y sindicales, casas, bueno hasta un hotel y el famoso Polideportivo capitalino.
Con esas referencias, sabrá muy bien qué y cuánto comprende ese terreno de 39 mil metros cuadrados, pero esos “pequeños” datos referenciales no los revelaron el miércoles durante un acto propagandístico realizado en Palacio de Gobierno en el que, además, se confirmó que dentro del equipo legal de la actual administración se encuentra otro pariente político de la mandataria.
La Triste Historia lo trató de “vender” como un “gran logro”, ya que tras el largo litigio que perdió el Ejecutivo estatal se “ahorró un aproximado de 294 millones de pesos” bajo un acuerdo, por lo que solamente le pagarán a la familia demandante 45 millones de pesos con recursos de las arcas pública ¡vaya logro!, una ganga.
Para que quede claro, no les hicieron ningún favor a los tlaxcaltecas, por el contrario, es un duro golpe a las finanzas públicas ya que mientras los campesinos claman, literal, por limosna ante el desastre de sus cultivos a causa del mal clima y la negligencia del gobierno de no contratar un seguro agrícola, por el otro, abren la chequera para pagarle a un particular.
No se supondría, dado que el mentado ex rancho San Isidro y Santa Bárbara, es ocupado por particulares con fines lucrativos, que sean ellos los que paguen ese dinero por predios que les fueron dotados bajo oscuros acuerdos, que así se confirman con la sentencia de aquel litigio.
Dada la negligencia se dañó el patrimonio público, por tanto, hablamos de delitos de corrupción, por tanto, más que anunciar un supuesto logro, tendrían que haber exhibido las denuncias penales correspondientes por aquellos tratos del pasado y beneficiados del presente, ¿cuántos exgobernadores, exfuncionarios y particulares están siendo procesados?
Además, no perdamos de vista que este tema está viciado desde su origen, porque aquella expropiación ordenada por Tulio Hernández en su gobierno fue sobre un terreno propiedad de un rival político.
Recordemos que el senador Osorio Ramírez representó en los años 50 al Partido Auténtico de la Revolución Mexicana, y fue rival electoral de Tulio en los años 60s cuando compitieron por ser diputados federales en el distrito 1, por cierto, aquella disputa post electoral quedó registrada en documentos históricos en el archivo de la Cámara de Diputados donde se dan cuenta de una serie de presuntas anomalías cometidas el día de la elección para que ganara el candidato tricolor.