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miércoles, 11 de diciembre de 2019

Sin Censura / ¿Adiós a la chorcha priista?




Parece que las vacaciones de más de 16 meses terminaron en el otrora poderoso Partido Revolucionario Institucional (PRI) porque los Santos Reyes les van a traer una nueva dirigencia, que si no pasa nada extraño, ahora sí los pondrá a trabajar.
Al menos esa es la idea de algunos priistas que quieren dar la pelea para tratar de cambiar el obscuro presente de este instituto político en Tlaxcala y dilucidar un mejor futuro, en especial, hacia la contienda de sucesión gubernamental del primer domingo de junio del año 2021.
Las reglas ya están en la mesa y el próximo domingo, a más tardar, sabremos si hay candidatura de unidad en torno al candidato casi oficial, el ex diputado local y ex funcionario estatal, Noé Rodríguez Roldán. También conoceremos quién será su compañera en esta aventura llamada elección del presidente y secretario general del Comité Directivo Estatal del tricolor.
Recordar que de acuerdo con los Estatutos del PRI, las personas que aspiren tanto a la presidencia como a la Secretaría  General  del Comité  Directivo de Tlaxcala, serán electos por el método que aprobó el pleno del Consejo Político Estatal, que de acuerdo con la sesión extraordinaria celebrada el 23 de noviembre  de 2019, aprobaron el procedimiento estatutario para renovar  a la dirigencia de la entidad,  optando  por la modalidad  de Asamblea de Consejeras y Consejeros Políticos.
En ese entendido, se dieron a conocer lo lineamientos que habrá de regir este proceso, en el cual, la propia cúpula del tricolor reconoce sus debilidades y necesidades, de ahí que admite serán los concesos la principal fortaleza que busquen cuidar y potencializar en su contienda interna.
Una fractura más, bajo la realidad que viven los priistas sería casi la tumba en Tlaxcala, ya que, como advierten, “a la luz de los resultados de los comicios federales  y locales del 2018 y 2019, el PRI reconoce la necesidad de llevar a cabo un ejercicio profundo de diagnóstico, diálogo interno e intercambio de puntos de vista al exterior de nuestra organización  para plantear, conducir y concretar los cambios que requiere para fortalecer su pensamiento político, en sus estructuras  y su capacidad  de actuación en  la sociedad del México contemporáneo”.
De acuerdo con la convocatoria, la cual consultar en la siguiente liga, http://pri.org.mx/bancoinformacion/files/Archivos/PDF/35196-1-20_50_23.pdf, el próximo domingo 15 de diciembre será el registro de las fórmulas de candidaturas y los días 16 y 17 de este mismo meses, habrá un período de garantía de audiencia sobre el registro de candidaturas y un día después, emitirán el fallo de aceptación de postulaciones.
Para lograr el registro, Noé Rodríguez y quien quiera competir por la dirigencia priista, tendrán que mostrar y demostrar con hechos, que son militantes “de convicción  revolucionaria, de comprobada  disciplina y lealtad al partido, contar  con  arraigo  y  prestigio   entre  la  militancia  y la  sociedad,  tener  amplios conocimientos  de los postulados del PRI y reconocido liderazgo.
Tendrán que acreditar carrera de partido y, como mínimo, una militancia fehaciente de siete años; estar al corriente en el pago de sus cuotas al partido, y sobre todo, haber desempeñado con anterioridad algún cargo de dirigencia partidista.
Con la carta de aceptación, los candidatos realizarán proselitismo a partir del 19 de diciembre de 2019 al 3 de enero de 2020, pues un día después, es decir, el 4 de enero, se realizará la asamblea de Consejeras y Consejeros Políticos en el que se conocerá el futuro de Noé Rodríguez o de quienes lleguen a inscribirse; aunque dudamos que haya más tiradores para esa posición.
Las asambleas electivas se realizarán en cada uno de los comités municipales priistas, en un horario de 10 a 16 horas y un día después, en la víspera de la llegada de los Reyes Magos, se efectuará el cómputo estatal electoral para dar a conocer los nombres de quienes integran la nueva dirigencia, esa que deberá sacar al partido del ostracismo.
Aunque la toma de protesta de la nueva dirigencia dependerá de la fecha que acuerden para tal fin con el Comité Ejecutivo Nacional del tricolor.
Con estas reglas, el PRI querrá y deberá aceitar un poco su maquinaria, esa que ahora está enmohecida por los resultados electorales recientes, pues de no hacerlo así y de continuar con la parálisis en la que se encuentra, las posibilidades de mantener la gubernatura, por mínimas que éstas sean, se terminarán por esfumar.
Aunque en Morena, los suyos, cada vez dudan más de una inminente y posible triunfo electoral en Tlaxcala en los comicios por venir. De eso pronto expresaremos nuestro pensamiento en voz alta y sin censura.

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