Por Edgardo Cabrera
Aunque para los gobiernos y los entes de salud los pacientes de Covid-19 se han convertido solamente en estadísticas y fuentes de datos para instrumentos de medición, en los hechos hablamos de seres humanos, de historias de vida.
Lo anterior viene a cuento porque la semana pasada el gobierno federal hizo un balance de la pandemia en nuestro país, se dio una cantidad enorme de cifras, producto de un sinfín de métodos de registro de casos, y van desde las personas que dieron positivo al coronavirus y los que ingresaron a un hospital, hasta aquellos que perdieron la vida o no se quedaron en casa.
Producto de la insensibilidad por “datificar” todo, está el caso de Tetlanohcan, en ese municipio la semana pasada se dio a conocer el primer caso confirmado de Covid-19 y con ello entró a la estadística de municipios afectados por la pandemia.
Sin embargo, en la población no se trató de solo un dato, por el contrario, comenzó a correr como reguero de pólvora el mensaje de un deschavetado que difundió por whatsApp santo y seña de la persona contagiada y de su familia, además de dar su domicilio, también aseguró que se trató, supuestamente de un inmigrante que burló a las autoridades de Estados Unidos y México para cruzar la frontera y regresar a Tetlanohcan.
Pero no solo es ese caso, en Zacatelco también subieron a grupos de whatsapp los datos de al menos una familia que tiene un paciente internado por Covid-19, de igual forma detallaron nombre y domicilio.
Recordemos también el patético caso del alcalde de Zitlaltepec y su cabildo quien hizo pública el acta de defunción de un habitante que murió a causa del coronavirus, alarmó a la población y no dijo que se trataba de una persona que viajaba constantemente a la Ciudad de México a vender tamales y que fue precisamente allá donde se contagió, resintió los estragos, fue hospitalizado y murió, como consecuencia le tomaron por horas la presidencia, en tanto que la familia fue estigmatizada, por cierto el PAN, nunca emitió un posicionamiento por su presidente municipal.
Y la lista sigue, de ahí que al hablar de datos no hay que perder de vista que no son solo cifras, son personas y familias que, al ser vulneradas en su identidad, se les pone en riesgo a la discriminación, pero también a la violencia.
HABLANDO DE CIFRAS
La Secretaría de Salud federal dio a conocer este fin de semana que el sábado fue el día que México reportó el mayor número de contagios y fallecimientos en las últimas 24 horas: 622 nuevos casos y 104 decesos por #Covid19.
Para el caso de Tlaxcala, los datos oficiales revelaron también incrementó en 24 horas: 5 casos y un fallecimiento, el sábado; 4 positivos el domingo, con lo que la entidad registra 81 contagiados, 25 personas recuperadas y 7 fallecimientos.
De este mismo indicador sigue el aumento de municipios con al menos 1 caso, ahora suman 26, luego de que se agregaran Tlaxco (1), Tepeyanco (1), Natívitas (1) y Altzayanca (1).
En tanto que los municipios que siguen sumando al menos 1 caso adicional están: Xicohtzinco que suma 2, San Pablo del Monte (3), Hueyotlipan (6), Chiautempan (2) y Apizaco (6).
A dichas estadísticas oficiales se agregan otras que se elaboran con algunas herramientas tecnológicas, por ejemplo, con el uso de iOS y Android, la semana pasada colocaron las autoridades federales a Tlaxcala como el estado con el peor acatamiento a la disposición de #QuédateEnCasa, fue la entidad con la mayor movilidad de su población.
Y desde luego que es cierto, basta recordar la negativa a suspender bailes, fiestas familiares, remates de carnaval, paseos, incluso chapuzones en balnearios, como en el sábado de Gloria.
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