BANDERAZO DE SALIDA
Por Edgardo Cabrera
Con el invento aquel de la “BOA”, cuyo documento ‘Top Secret’ fue el hazmerreír de las “benditas redes”, el presidente López Obrador dio el banderazo oficial para el arranque de la carrera por el 2021.
Una semana antes ya no se “quedó en casa” y reinició sus giras por el país, con el pretexto de darle el banderazo a las obras del Tren Maya, toda vez que su actividad en tierra es fundamental ante el desplome en las preferencias de su partido, pero también ante los altibajos que marcan las encuestas respecto de su popularidad.
No olvidemos que Morena es López Obrador, dejar al partido por su cuenta los conducirá al fracaso en las próximas elecciones.
Ahora y ya con el banderazo electoral, aprovechando la semana que estuvo de nuevo confinado en Palacio Nacional, con el llamado a salir sin miedo a la calle, y con sus datos de la pandemia por Covid-19 a la baja, de nueva cuenta este lunes reinició sus giras en Veracruz, y este martes está en Tlaxcala, el resto de la semana visitará Puebla, Hidalgo y Morelos.
EN TLAXCALA
Para nuestro caso, la agenda está vinculada con temas de seguridad, pero también se espera una serie de actividades y reuniones privadas.
Según algunos de sus seguidores, vendrá a “poner orden” a todos en su partido y gobierno; a unos por holgazanes, otros por corruptos y ambiciosos, a unos más por poner en entredicho y ridículo sus programas estrella en materia social, al tiempo de dar luz y rumbo a los suyos que parecen extraviados entre sus ambiciones personales y las prioridades de su gobierno.
Recordemos que los despidos en el Bienestar, de personas simpatizantes y operadores de Morena, no pasó por alto para la Presidencia, menos para las cúpulas del partido, incluso porque uno de los afectados se fue a plantar frente a las oficinas de López Obrador para manifestarse.
También, nos cuentan, prendió los focos rojos el desastre que traen en materia de comunicación en Tlaxcala ya que ellos mismos se ponen el pie, al mandar el mensaje de un estado represor, por ejemplo, ante la presencia de militares armados al interior de instituciones educativas y frente a los menores de edad que simplemente acudieron hace un par de semanas por las becas del gobierno federal.
Tan es así que una vez que el presidente López Obrador confirmó su visita, durante su conferencia matutina del viernes, se apresuraron a improvisar una rueda de prensa en la delegación federal del Bienestar para explicar el “nuevo esquema” de entrega de estos apoyos, dejando de lado concentraciones masivas con la presencia de los Guardias Nacionales y dar paso al uso de la tecnología y la infraestructura bancaria para hacer llegar esos apoyos.
Por cierto, que, en la citada conferencia, la delegada Cuéllar se exhibió al evidenciar su desconocimiento a precisión del programa de becas y, con todo y tarjetas informativas, sus tropiezos fueron constantes, incluso hasta se aventaron la puntada de negar el reciente asalto a las oficinas del Bienestar; por el contrario, quien brilló en su protagonismo fue Meneses, ¿acaso ya se habrá definido y anda buscando ser candidato a un nuevo puesto o cargo de representación popular?… al tiempo.
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