REVUELO
Edgardo Cabrera
Revuelo en redes sociales causó hace unos días el franco coqueteo de Paco Hernández para buscar, por tercera ocasión consecutiva, la alcaldía capitalina.
Una publicación de hace 7 años retomada, a colación del camino al 2021, y ante el cuestionamiento si de nueva cuenta lo veremos en las urnas, provocó una serie de comentarios, la mayoría, hay que decirlo, en positivo.
Como político que es, Paco se dejó querer, nunca dijo “¡sí!” abiertamente, pero tampoco dijo que no.
Lo cierto es que el ex candidato perredista anda trabajando de cara a las elecciones, quiere ser el sucesor de Anabell Ávalos y por supuesto que trae capital, no olvidemos que en su última competencia estuvo cerca de hacer la hazaña.
Ahora, el mismo Paco Hernández, me confesó hace algunas semanas que se requiere del acuerdo de varios liderazgos capitalinos y conformar un bloque; de partidos políticos no habló, pero todo parece indicar que su primera opción la trae en Movimiento Ciudadano.
En tanto el PRD, su antiguo partido, nos enteramos que ya andan explorando otras opciones para la capital del estado, una de ellas apunta hacía el PAC, con Serafín Ortiz, pero también no se descarta un perfil ajeno a la política, una seria opción la tienen en la iniciativa privada con Nydia Cano, la cofundadora de la empresa de transporte privado Pronto.
La disputa por Tlaxcala capital, empieza a acelerarse.
LA BOITA
Luego de que la dirigencias nacionales del PAN, PRI y PRD intensificaran las negociaciones y el cabildeo para conformar un bloque opositor, el mismo que hace mes y medio el presidente López Obrador nombró como la BOA, en Tlaxcala la chiquillada sintió pasos.
El asunto es que los minipartidos, siempre enamorados del poder a costa del arrastre de las grandes fuerzas políticas, podrían perder posiciones que sentían seguras, como en cada elección.
Ahí están los partidos locales Socialista y Alianza Ciudadana, evidentemente los franquiciatarios ya no son lo que eran en el pasado. Rosalía Peredo y Héctor Ortiz, respectivamente, han perdido peso político y su capital parece venido a menos en cada elección, basta revisar sus últimos resultados y la ausencia de posiciones en el Congreso local.
Luego aparecen Nueva Alianza y Movimiento Ciudadano, institutos políticos que no brillan en la vida cotidiana de los tlaxcaltecas, sus liderazgos son inocuos, solamente se les ve cuando se acercan los procesos electorales, el resto del tiempo esconden la cabeza.
Movimiento Ciudadano tiene una curul en el Congreso del estado, sin embargo es como si no tuvieran nada, a su única legisladora le endulzó el oído el “encantador de serpientes”, el único que ha sacado provecho y raja política al coordinadar al bloque “pural”.
El Panal es un cero a la izquierda, ni los maestros del SNTE, que antes eran su fortaleza, los respaldan, ahora ven un mejor camino regresando al redil de Elba Esther Gordillo con Redes Sociales Progresistas que recibirá el registro a finales de agosto.
De ahí que de cara al 2021, a la chiquillada solamente le restará sumarse a un bloque amplio, o de plano integrar su propia BOITA, ir sueltos los condenará a la derrota ante la cerca de veintena partidos que estarán con posibilidades de competir.
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