Sin Censura / Tlaxcala, terrible y perverso para las mujeres
Por Juan Luis Cruz Pérez -agosto 19, 2021
Tlaxcala, es catalogada, por los hechos, como una entidad en donde las mujeres se enfrentan a un contexto terrible y perverso. Muestra de ello es que, en el último lustro, los asesinatos con violencia en contra de este sector se han duplicado, por desgracia.
Tlaxcala, es catalogada, por los hechos, como una entidad en donde las mujeres se enfrentan a un contexto terrible y perverso. Muestra de ello es que, en el último lustro, los asesinatos con violencia en contra de este sector se han duplicado, por desgracia.
Por ello, con agrado, pero sin que sea la panacea para detener esta grave situación, ayer el gobierno de la República emitió la Alerta de Violencia de Género contra las Mujeres (AVGM) en todo el estado.
Con ello, sobre todo la próxima administración estatal, deberá atender 80 acciones propuestas para frenar la violencia y la desigualdad que en pleno siglo 21 padecen miles de niñas, hijas, madres, tías, sobrinas, vecinas, solo por el hecho de ser mujeres.
En lo que va del año, colectivos feministas llevan computados poco más de 20 feminicidios y la impunidad en la mayoría de los casos es la constante; esa le lacera aún más.
Pero más allá de la politiquería, es un hecho que, en Tlaxcala, las condiciones para las mujeres son terribles y perversas y entre todos, debemos hacerlas cambiar.
Muestra de ello son los datos, que, a manera de conclusión, justifican la citada declaratoria. Por ejemplo: En Tlaxcala tiene una mayor remuneración salarial los hombres que las mujeres; la entidad ocupa el tercer lugar nacional por la mayor diferencia de pago entre uno y otra a pesar de realizar el mismo trabajo y cumplir con la misma jornada.
De acuerdo con la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres (Conavim), Tlaxcala es el cuarto estado del país con mayor número de embarazos adolescentes y donde una de cada cinco estudiantes es violentada en su escuela. Asimismo, una de cada tres mujeres ha sido violentada en la vía pública, por el simple hecho de ser mujeres.
Las muertes violentas de mujeres se duplicaron en los últimos cinco años y 76 feminicidios no han sido investigados como tales. Tan solo este año, el registro de las Organizaciones de la Sociedad Civil (OSC) dan cuenta de más de 20 casos de ese tipo.
La declaratoria será una loza para la próxima administración estatal y las 60 municipales, pero entre todos, y con apoyo de la Federación, tienen la obligación de cambiar las condiciones que enfrentan nuestras madres, hijas, esposas, compañeras y vecinas.
Entre las recomendaciones que deben atender es el reforzamiento de los derechos a la educación, a la salud y al desarrollo para las mujeres y niñas que viven y transitan en Tlaxcala, así como establecer una estrategia municipal coordinada de prevención de los delitos de trata de personas, implementar un programa estatal de atención a niñas, niños y adolescentes con perspectiva de infancia y juventudes; además de un programa de apoyo, que incluya a sus familias y las víctimas indirectas de feminicidio.
Será impostergable, como lo exigieron desde hace años en el ámbito local diversas agrupaciones, la creación de una Fiscalía especializada para atender trata de personas, feminicidio y desaparición forzada; y asegurar los recursos financieros, humanos y materiales que permitan el desempeño de las instituciones de seguridad, salud, educación, procuración, administración e impartición de justicia y atención a las mujeres.
La declaratoria alerta de violencia de género contra las mujeres deber ser visto como un mecanismo de protección de los derechos humanos de las mujeres que debe servir para establecer acciones gubernamentales de emergencia para enfrentar y erradicar la violencia feminicida y de todas esas conductas sociales y gubernamentales que impidan el ejercicio pleno de los derechos humanos de las mujeres.
La emisión de esta declaratoria es un primer paso; este problema no se acabará con decretos hechos en el escritorio y mucho menos con discursos y buenas intenciones. Será necesario e imperante que las 80 recomendaciones del grupo de trabajo sean acatadas por los cuatro órdenes de gobierno, -federal, estatal, municipal y de comunidad-, pero también que la sociedad vigile y exija su cumplimiento preventivo, porque deseamos un Tlaxcala en paz, y en donde todas y cada una de las mujeres puedan vivir y desarrollarse sin miedo y a plenitud.
Al margen
Los movimientos del ajedrez político, en la búsqueda de un nuevo cargo o para ser tomados en cuenta por la nueva administración, están al orden del día.
Ayer, la magistrada interina del Poder Judicial, Ernestina Carro Roldán, oficializó su renuncia a ese cargo con el carácter de irrevocable.
La dimisión confirma las versiones de que Carro Roldán cambiaría de aires a partir del próximo mes. Dejará Ciudad Judicial para, en caso de ser electa, despache como titular de la Procuraduría General de Justicia del estado.
La concreción de esta posibilidad se dará una vez que Lorena Cuéllar asuma la titularidad del Ejecutivo local y remita al Congreso del estado su propuesta de terna de los profesionales en derecho que podrían ocupar esa posición.
Y como la próxima legislatura no querrá romper la tradición de ser solo la oficina de trámite del Ejecutivo, nombrarán como Procurador a quien así decida la mandataria y ahí parece que Carro Roldán lleva mano, pie y cuerpo completo.
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