Delegado de la capital busca hacer agosto con la Feria de Tlaxcala.
Por Alfredo González
A placer Cierra circulación en calles para vender espacios para comercio semi fijo e informal al exterior de recinto ferial, excusa que busca recaudar recursos.
A escasas horas de que sea inaugurada una edición más de la Feria de Tlaxcala tras dos años de suspensión por la pandemia, las molestias entre vecinos del recinto ferial crecen al ser afectados por una controvertida decisión del delgado de la Colonia Adolfo López Mateos de la ciudad capital, él cual pretendería “hacer su agosto” con la venta de espacios para el comercio informal.
Y es que, pobladores de la zona acusaron que su autoridad de la colonia, Rigoberto Ordóñez Flores, habría decidido de manera unilateral cerrar la circulación en calles de la periferia al acceso principal del recinto con el fin de acaparar más espacios en la vía pública para vender lugares a comerciantes informales, sin tener consideración en dejar libertad de tránsito y acceso a sus domicilios a decenas de familias.
En ese sentido, señalaron que de manera anual se realizaba un corte a la circulación sobre la calle Adolfo López Mateos, entre la avenida de los deportes y agricultura, lo que, sumado a los cambios en la circulación debido a las adecuaciones obligadas por la feria, torneaba caótica la situación para los habitantes de la colonia, sin embargo, la decisión que el delegado ejecutó sin consultar a los vecinos originó que la molestia y señalamientos salieran a flote.
Expresaron que a inicios de esta semana tomó por sorpresa la colocación de lonas y estructuras metálicas al exterior de más viviendas sobre la calle López Mateos, obligando a que el cierre se extienda hasta la calle Ciencias, dejando sin posibilidad de tránsito y acceso a domicilios en dicha zona.
Por otro lado, comentaron que el acceso con vehículos hasta sus hogares en dicha colonia se complica aún más, al verse obligados a rodear todo el recinto ferial para poder acceder a sus domicilios, lo que respecta poco más de media hora de trayecto innecesario al encontrarse a unos metros de su propiedad, por lo que calificaron de absurda la decisión de su autoridad de colonia y el municipio que no ha puesto atención a la problemática originada año con año.
En cuanto a la venta de espacios a comerciantes semi fijos y ambulantes, los vecinos aseguraron que Ordóñez Flores ofertó espacios de venta en la vía pública y al exterior de domicilios por el orden de los mil 500 pesos por metro cuadrado, lucro que, de sucedido con versiones del propio delegado, serviría para que la colonia recabe “recursos” que el ayuntamiento capitalino encabezado por Jorge Corichi Fragoso les negaría.
A dicha recaudación, dijeron se suma la tarifa que el delegado colonial cobra a vendedores ambulantes que proliferan en calles de la zona, así como un supuesto cobro a vecinos del lugar que pretendan utilizar el exterior de sus viviendas como estacionamiento para visitantes, buscando obtener una considerable captación en recursos para la cual, sentenciaron, no se expiden recibos para quienes realizan dichos pagos a la delegación, alimentando las sospechas de desvío de recursos.
Por lo que, exigieron que el gobierno municipal y estatal intervengan en dichos actos de posible abuso, tomando en cuenta que no es la primera ocasión en que Rigoberto Ordóñez funge como delegado, siendo beneficiado por años de las concepciones otorgadas por la temporada, a las que se le sumaría la entrega de un espacio al interior del recinto ferial como parte de una concesión del patronato de ferias.
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