CASTIGADOS
Por Edgardo Cabrera
El Colegio de Bachilleres se convirtió en el centro de castigo de los malos funcionarios, particularmente de aquellos que fueron removidos por no dar el ancho, porque se le acabó el compromiso o porque los detectaron en actos de corrupción.
Es el caso de quien era delegado de Movilidad en Tlaxco, resulta que luego de que salieran a relucir supuestos actos de corrupción durante su estancia en ese lugar, al detectar medio millar de trámites irregulares, la decisión de la triste historia fue removerlo del cargo, pero, en un claro acto de solapamiento y protección, en lugar de iniciarle un procedimiento administrativo e incluso penal prefirieron mandarlo al plantel 1 del Cobat “como castigo”.
Ahora en su nueva función en materia administrativa, le han tenido que llamar la atención por llegar tarde a trabajar, amén de que su jornada concluye por la noche, es subordinado y no jefe.
El castigado, que no sancionado, es hijo del secretario particular de Cuéllar, lo que explicaría la impunidad con tal de seguirlo manteniendo en nómina.
En la misma situación se encuentra quien fuera titular de la Secretaría de Movilidad a quien removieron de forma inexplicable, y es que contrario a otros malos funcionarios e incluso a quienes se les han documentado actos de corrupción (uno de ellos Homero por otorgar contratos leoninos), Luz María tuvo el pecado de la debilidad, no pudo o quiso meter orden en la dependencia para no incomodar a una larga lista de recomendados que ocupaban cargos directivos en la dependencia, uno de ellos, quien fue director de transporte y beneficiado con aquel millonario trato con la USET para ofrecer el servicio de camiones a trabajadores.
Cierto, durante el paso de Luz hubo un desastre en Movilidad, igual que ahora, pero en su corto periodo se incluye el robo de documentación oficial entre ellos permisos y tarjetas de circulación, lo cual terminó por costarle el puesto a quien también mandaron castigada al Cobat.
Tras ser asignada en uno de los planteles en tareas administrativas solamente duró poco más de una semana en el puesto, no soportó la sanción, por lo que fue “rescatada” por el que cobra como titular de la Segob dándole un puesto de bajo perfil en esa dependencia.
NI DISCULPAS
En eso de las recurrentes torpezas en la Procuraduría de Ernestina, la semana pasada además de aparecer con cuatro sujetos encapuchados y con armas largas como guardaespaldas, la dependencia fue exhibida por su uso con fines politiqueros.
Y es que solamente así se explica la detención de una integrante del Sindicato 7 mayo que levantó la mano para participar en el proceso interno de renovación de la dirigencia sindical, y es contraria al grupo de los compadres de Cuéllar.
Julieta Rodríguez acudió a solicitar su carta de antecedentes no penales, fue en ese momento que la detuvieron y esposaron por un delito que data del año 2014 derivado de las protestas sindicales realizadas en aquel año en el Congreso del estado por las reformas a pensiones, y de lo cual la carpeta se encontraba arrumbada, sin embargo, de forma apresurada la desempolvaron.
Horas después de su detención fue liberada, evidenciando el dolo, o cómo explicar que meses atrás la misma dependencia le concedió a Julieta otra carta de antecedentes no penales.
Por estas y otras cosas más, como la tortura y muerte de un detenido, pero también, luego de la exhibida internacional de que en Tlaxcala la Trata #síexiste, doña Ernestina tendría que comparecer ante el Congreso y no solapar torpezas e ilegalidades.
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