Por Manuel Fernández
Dentro de la confusión, de los reclamos, del castigo mediático y social, se “normaron” a las plataformas digitales de movilidad en el estado de Tlaxcala, asunto donde lamentablemente un sobrado puño de medios de comunicación mal informaron sobre la supuesta cancelación del servicio de éstas en Tlaxcala, que levantó toda una controversia para identificar a los buenos vs los malos.
Deslinde
Lo que queda claro, es que en un afán de equilibrar el tema entre el monopolio transportista y las apps, el Congreso Local, se lavó las manos y entregó el poder de la autorización a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes del Gobierno Estatal, la SECTE, un ejercicio similar, en el que el legislativo decidió dar más poder al auditor superior del OFS para reducir responsabilidades.
El reclamo
El reducido grupo de transportistas, (ya que a nivel estatal no representa ni el 10% de las unidades) decidió volver al congreso a reclamar, después de intentar masticar el resolutivo de la ley, donde lamentablemente les tuvieron que explicar con palitos y bolitas como se había desarrollado la sesión, invitándolos a consultarla en las transmisiones en vivo e incluso, el presidente de la mesa, dijo brindarles la grabación oficial.
Piedras
Pero a quien tenían que verdaderamente reclamarle no estaba, el que calentó el escenario y presentó la propuesta de ley.
Es evidente, al Diputado Miguel Piedras no le salió la jugada y tuvo que irse a esconder, pues miren, que hay que tenerlos muy morenos, para mover al estado por un interés meramente personal.
Entonces…
Si este gremio, que no le entiende a la tecnología, no puede consultar los medios digitales, que no diferencia entre “combis” y unidades particulares, ¿Como va a desarrollar una app, o como va a encaminar a un equipo creativo a intentar ser competitivo contra Uber o tener la aceptación estatal de Pronto? Zapatero a tu zapato, para todos hay, es algo que la vieja guardia no entiende, y no solo en el transporte, en muchas áreas donde la necedad es el único argumento infalible.
A colación
Los partidos y políticos, aprovechando la confusión, se subieron al tren de las plataformas para mostrar su aceptación, sin embargo aunque hubo una polarización muy potente, pareciera que los votos a favor de la reforma a la ley, aceptaban normar y permitir que las plataformas que cumplieran los requisitos de la SECTE puedan operar, y quienes votaron en contra, ¿votaron contra poner obstáculos o contra dejar a las plataformas operar?
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